¿Son enfermos crónicos las personas celíacas?

Luis García Enrique, Director general de Isendi Farma


¿Son enfermos crónicos las personas celíacas?
30 de Julio del 2015 | Distro Argar

La celiaquía es una enfermedad crónica del aparato digestivo, que se caracteriza por una intolerancia permanente a una proteína llamada gluten, que se encuentra presente en los cereales como el trigo, la avena, la cebada o el centeno. Una enfermedad, sin tratamiento, salvo el privarse de todos aquellos alimentos que contengan gluten o trazas de gluten en su composición, que en todas aquellas personas que la padecen reduce su capacidad para absorber nutrientes y que puede conllevar otras enfermedades asociadas.

En este sentido y según datos que facilita la Federación de Asociaciones de Celiacos de España, uno de cada cien bebés que nacen son celiacos, además de que un porcentaje importante de pacientes en España, en torno al 75%, están sin diagnosticar aún.

Este importante número de personas se enfrentan desde el momento en el que les es diagnosticada esta enfermedad, que no se puede curar, a un nuevo futuro, ya que deben variar su dieta de manera que dejen fuera de ella todo alimento que contenga o pueda contener gluten o trazas de ello, lo que en un momento en el que cada vez los productos alimenticios son más elaborados, llevar una dieta libre de esta proteína equivale a realizar un desembolso en alimentación muy superior a aquella a la que se enfrenta cualquier persona que no tiene esta enfermedad, llegando a ser difícil o incluso imposible de asumir para muchas personas.

Y es que pese a ser una enfermedad que se podría catalogar de crónica, puesto que quien lo padece ya lo hace para toda la vida, y no tiene cura, no cuenta con ningún tipo de ayuda económica a nivel nacional para la compra de productos especiales sin gluten.

No obstante, si es de recibo destacar que hay comunidades autónomas que ya están empezando a trabajar sobre este tema. La Consejería de Bienestar Social, Deporte y Juventud de Navarra, concede, en virtud del Orden Foral 197/2006, concede ayudas a familias en cuyo ámbito existan uno o más enfermos celiacos. A Navarra se une el Gobierno de Extremadura, que concede ayudas alimentarias para los celíacos con bajos recursos económicos y que consiste en el envío de lotes de alimentos a las familias; así como la Diputación Foral de Biskaia que ofrece una ayuda económica pero únicamente a residentes en Bizkaia.

Sin embargo, las personas celíacas en España se encuentran lamentablemente muy lejos de la situación que se vive en la mayoría de países de la Unión Europea, donde los productos sin gluten están incluidos dentro del  Régimen de la Seguridad Social o se destina algún tipo de ayuda para que el celíaco pueda adquirirlos, como es el caso de Italia, Francia, Alemania, Grecia, Bélgica o Dinamarca, entre otros muchos.

Por otra parte, otro aspecto sobre el que cabe reflexionar es sobre el hecho de que pese a que el gobierno de España no ofrece ayudas o subvenciones a los ciudadanos celiacos para la compra de alimentos libres de gluten, los distintos ministerios que conforman el gobierno nacional sí que conceden ayudas a aquellos de sus trabajadores que tienen esta enfermedad, según recoge la web de la Asociación de Celíacos y Sensibles al Gluten de la Comunidad de Madrid (www.celiacosmadrid.org).

Si el gobierno es sensible con sus trabajadores, por entender las dificultades que tienen las familias con miembros celíacos para hacer frente a la compra de estos alimentos, ¿no debería comenzar a ser también sensible con todos los ciudadanos españoles a los que representa y sobre los que gobierna? ¿Si los enfermos crónicos reciben subvenciones en la compra de sus medicamentos, no deberían también recibir ayudas o subvenciones las personas celíacas puesto que su único medicamento de por vida es llevar una dieta libre de gluten?
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